La primer visita de Linkin Park al país resulto ser un evento que marco la historia en el país. Un concierto cargado de energía y nostalgia, en donde la banda ofreció una experiencia inolvidable, mezclando sus icónicos temas con algunas de sus nuevas producciones.
Linkin Park comenzó fuerte con «Somewhere I Belong», seguido de «Crawling» y «Points of Authority», canciones que encendieron de inmediato la euforia de la multitud. El setlist continuó con «New Divide», que sumó un toque único y electrizante. Sin embargo, uno de los momentos más inesperados llegó con la presentación de su tema nuevo «The Emptiness Machine». A pesar de algunos problemas técnicos durante la primera interpretación, la banda decidió repetirla tras un breve descanso, mostrando su compromiso con el público y asegurando que todos pudieran disfrutarla al máximo.
El segundo acto comenzó con «The Catalyst» y «Waiting for the End». Una combinación de visuales y arreglos actualizados en estas canciones mostró una versión contemporánea de la banda, sin perder la esencia que los caracteriza. Además, el solo de Joe Hahn y la mezcla de «When They Come for Me» con «Remember the Name» añadieron un toque creativo y único al set.