La Bienal Internacional de Arte y Ciudad BOG25, evento liderado por la Alcaldía Mayor de Bogotá a través de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, ofrece más de 70 actividades de Mediación para crear ambientes creativos que propicien la interacción entre los diversos públicos y las obras.
Una de ellas es la de Formación de Mediadores con atención a públicos e instituciones educativas, en la que han participado a la fecha más de 2 mil personas, entre estudiantes y público en general, a través de recorridos, activaciones y encuentros espontáneos que hacen parte de un programa que invita a vivir la Bienal con la fuerza de los sentidos y la imaginación.
Crear nuevos puentes con las obras y estimular la creatividad y la imaginación es el propósito del programa de Mediación de la Bienal Internacional de Arte y Ciudad BOG25, una oportunidad para interactuar a través de experiencias colectivas y explorar espacios y territorios que incorporan activamente a las comunidades.
Son más de 70 actividades en siete franjas que incluyen talleres, charlas, activaciones con artistas y encuentros inesperados a los que se suma el componente de atención a públicos con recorridos guiados a instituciones educativas y público en general, todo ello en función de crear espacios que indaguen acerca de la relación entre felicidad individual y colectiva, eje curatorial de esta primera versión de la Bienal.
“Desde el programa de Mediación buscamos impulsar un acercamiento al arte contemporáneo que no está basado en la idea de que el arte hay que comprenderlo. Con las actividades de programación y atención a públicos promovemos una exploración creativa que nos cuestione e invite a plantearnos un problema, propiciando nuevas relaciones con el arte, generando espacios de encuentro donde no entender es más bien una virtud”, comenta Cristina Lleras, coordinadora de Mediación de la Bienal Internacional de Arte y Ciudad BOG25.
El programa inicia con el proceso de Formación a mediadores que hoy cuenta con un equipo de 21 integrantes, a los que se suman pasantes y voluntarios, jóvenes de diferentes localidades de Bogotá, en su mayoría estudiantes universitarios y egresados con conocimientos en artes visuales, música y trabajo comunitario.
Este grupo en el que también hay artistas y formadores, acompaña con conocimientos y propuestas muy diversas a los diferentes públicos de la Bienal, así como a colegios y universidades, siempre en función de construir nuevos aprendizajes, sin explicar las obras desde una lógica racional o interpretativa.
A la fecha, el programa de Mediación ha contado con la participación de cerca de 700 estudiantes de instituciones educativas de localidades como Barrios Unidos, Usaquén, Fontibón, San Cristóbal, Chapinero, Santa Fe, Teusaquillo y Kennedy, y más de 1.500 personas que han recorrido las diferentes sedes de la Bienal inspirados por la curiosidad y la imaginación.
Nicolás Ayala, joven de la localidad de Fontibón y profesional en Relaciones Internacionales, con experiencia como Mediador desde 2019, comenta que “el arte puede ser una herramienta para generar inquietudes, fijar la atención y la mirada en elementos que nos motiven y a partir de ahí formular preguntas que acompañen la vida cotidiana de los visitantes a la Bienal”.






